"Sleeping Beaty", opera prima de la realizadora australiana Julia Leigh, con Emily Browning como "Lucy" la bella protagonista (Sucker Punch). Esta es una película cruda acerca de cómo una jóven estudiante se prostituye en una casa de Elite para un grupo de hombres aristócratas muy adinerados. A Lucy le viene bien el dinero así que cierra el trato con Madame Clara el cual consiste en tomar un tecito muy dulce y luego irse a dormir a una bella habitación con una cama matrimonial muy bien decorada y ahí dormir como una bella durmiente. Lucy está anesteciada, Lucy no recuerda, "Lucy in the sky with diamons", pues al tomarse el apetitoso té que la duerme como princesa de película disney, horrorosos hombres se acuestan en la misma cama con ella y sacian sus espeluznantes fantasías sexuales. En la habitación entran hombres de todo tipo, desde fetichistas hastas aquellos obsesionados con la muerte.
"Sleeping Beauty" es un film de trama erótico con una mirada femenina. Tiene una excelente puesta en escena, un arte de admirar, y la actuación de la protagonista no esta nada mal. Las vestimentas son muy a lo Passolini en "Saló, 120 días de Sodoma", lencería, peinados y actitudes femme fatale y una dirección de arte que da de envidiar.
En este film se escuchan voces femeninas, es una odisea y una entrega de lo que la sociedad masculina ha creado, que vean el monstruo que se esconde detrás de tanto maquillaje.